Por Eduardo Stanley
Jessie Reyez, hasta hace poco una cantante apenas conocida, está empezando a dar qué hablar. Incluso se acaba de presentar en el Festival Outside Lands 2018, de San Francisco, realizado del 10 al 12 de agosto.
Reyez canta con el alma. Al final de cada una de sus intensas canciones parecería quedarse sin aliento. Su entrega es total. En cada tema nos cuenta su vida, sus sentimientos íntimos con una pasión poco común. Al final de su concierto, el público siente que la conoce como si hubiera compartido una plática íntima con ella, en un café, a solas.
Y también expresa sus opiniones políticas. Por ejemplo, cómo sufrió acoso sexual por parte de un productor que casi la lleva a dejar la música, experiencia que plasmó en el tema “Gatekeeper”. Jessie no se guarda nada, lo narra y lo denuncia, y exponiendo su rebeldia, grita, “#MeToo” isn’t new!” (“¡#YoTambién no es nuevo”!)
La música de Reyez es una mezcla de indie y folk y su voz algo ronca suena tan natural como su música, emocionando al público.
Al final de su concierto, con una ingenuidad de adolescente, cuenta que por fin tiene una banda —por cierto ¡excelente! Así es Jessie Reyez. ¡Y ojalá nunca cambie!
Otro artista latino que se destacó en el festival es Chicano Batman, la ya reconocida banda de Los Ángeles formada en el 2008 y que recién lanzó su tercer álbum, “Freedon is Free”. Su música en una fusión generosa de ritmos que van desde el indie hasta tropicalia y, por supuesto, la amplia variedad de ritmos latinos.
Los cuatro integrantes de la banda visten a la usanza de las bandas tradicionales de música de años atrás, algo que ya se convirtió en su sello.
“El nombre de Chicano Batman es una mezcla ideológica y cultural, el pop y nuestras raíces,” comentó Bardo Martínez, vocalista del cuarteto durante una entrevista antes de su presentación en Outside Lands. Para Gabriel Villa, el baterista de la banda, de origen colombiano, la cultura latina no es una sola, “Vivimos una mezcla incluso dentro de nuestra cultura latina, y eso es bonito. No hay que olvidar que muchos de nosotros también tenemos raíces africanas o indígenas”.
Y estas mezclas e influencias son las que Chicano Batman quiere plasmar en su música. “Las nuevas generaciones de latinos han perdido parte de sus herencias culturales, por eso sentimos que hay muchos deseos de buscar esas raíces… Y nuestra música es parte de este proceso, con un mensaje de amor, de resistencia, de futuro, de honestidad”, concluyó Villa.
Otros dos artistas latinos se hicieron presentes en Outside Lands: Sabrina Claudio y Cuco.
Claudio, nacida hace 21 años en la Florida, es una cantante pop que en esta ocasión evocó a las artistas de cabarets de los años 40s o 50s, incluyendo en su vestuario. Su voz grave y la buena musicalización fue bien recibida por el público.
Cuco, de 19 años, también tiene seguidores de su música romántica con influencia electrónica.
Sin embargo ambos carecen de gran creatividad.
Entre la gran cantidad de artistas que se presentaron en esta XI edición de Outside Lands, destacó la banda japonesa Kikagaku Moyo. Este grupo de cinco músicos se formó en el 2012 y grabó tres álbums y varios promocionales y sencillos.
La música de Kikagaku Moyo es principalmente instrumental. La voz no juega un papel destacado, más bien es casi un murmullo que acompaña a la música. Entre los instrumentos se incluye el sonido inconfundible de la cítara que contribuye a darle a esta banda un acento original y reconocible, además de cierta mística oriental y nostalgia de los 60s.
Kikagaku Moyo ya ha logrado reconocimiento en Europa y Estados Unidos gracias a numerosas presentaciones y una extensa gira en el 2017.
Otra buena sorpresa fue la presentación del trío inglés GoGo Penguin con su melodioso y enérgico jazz.
Outside Lands se destaca por ser un festival que incluye una amplia muestra de la gastronomía y de los vinos y cervezas artesanales de San Francisco. Y si la música es creatividad, ¿porqué no la comida? ¿Qué tal sushi burritos, porcini donas, croquetas de chorizo y queso Manchego, cups de chocolate y peanut butter, hand-held fennel sausage calzones, o Nepalese burritos? La oferta es demasiado amplia como para describir y tres días no son suficientes para experimentar tantos sabores!