El 8 de Julio, las rutas fijas de autobuses de Visalia, Dial-A-Ride, Sequoia Shuttle y V-Line fueron suspendidas porque los conductores se declararon en huelga.
Es sorprendente ver el tránsito del centro de la ciudad tan desolado. Agregale una planta seca rodadora con este calor, y la escena se parecería a un pueblo fantasma. No autobuses. Nada de gente. Sin movimiento. Nada más que un sol caliente reflejado y realzado por un desierto de cemento.
El único movimiento durante la mayor parte de julio fue cuando los miembros del sindicato Teamster Local 517 y sus seguidores formaron piquetes. Se reunieron en las mañanas durante varios días, soportando el verano del Valle Central para dejar claro su mensaje: no iban a retroceder.
Siempre hay algo muy inspirador en que un sindicato se enfrente a grandes organizaciones. Quizás porque es una de las últimas formas en que la clase trabajadora puede generar cambios en este país. Las huelgas sindicales son recordatorios de que tenemos poder, siempre que podamos trabajar juntos.
Visalia es una ciudad pequeña con casi 143,000 habitantes pero su sistema de tránsito, Visalia Transit, tiene rutas hacia y desde otras ciudades locales como Tulare, Farmersville y Exeter. Además de sus líneas regulares de autobús, Visalia Transit también ofrece servicios de transporte de ida y vuelta al parque Sequoia y una línea para ir a Fresno que es comúnmente usada por los estudiantes de Fresno State. Todas estas líneas se gestionan a través de la empresa nacional TransDev.
Durante la huelga, Greg Landers, secretario de Teamsters 517, explicó la situación que tuvieron con TransDev: “Pasamos dos meses [negociando] sin ningún aspecto económico en el contrato, que es todo menos dinero. Entonces, el primer día que nos metimos en economía, rompieron las negociaciones y dijeron: “Todo lo que tenemos es un 5% para ofrecerles, no queremos negociar nada más”. Los conductores querían más tiempo por enfermedad, querían más vacaciones y querían un aumento de $2.50. El 5% significa aproximadamente $1.32 dólares más la hora. Lo votamos y fue rechazado por un amplio margen. La empresa regresó y en su lugar nos ofreció $2 dólares pero no dijeron “sí” a nada más que habíamos pedido.
Dijimos que no, que estas otras cosas son muy importantes para nosotros. Lo votamos y le dimos a la empresa una extensión de 7 días porque nuestro contrato expiró el 30 de Junio. Salimos el 7 de Julio. Volvieron con nosotros, todavía ofreciéndonos $2, dos días de vacaciones adicionales, que es lo que queríamos, pero solo un día más por enfermedad. No vamos a votar por ello. Ellos conocen nuestras demandas, hasta que no cumplan con nuestras demandas no vamos a votar por ello”.
El lema de la ciudad de Visalia es “La puerta de entrada a las Sequoias” y personas de todo el mundo dependen del transbordador para ver esos árboles gigantes. Muchos hoteles y restaurantes dependen de que los turistas se queden en Visalia mientras visitan nuestros parques nacionales y, sin este servicio de transporte, su estadía en Visalia se vuelve menos conveniente y, por lo tanto, menos probable.
Muchos estudiantes de Fresno State de Visalia, Tulare y otras ciudades vecinas a menudo toman el largo viaje desde el Transit hasta la escuela sin otra opción si es que no tienen acceso a un automóvil.
Esto por supuesto sin mencionar a las personas que dependen del tránsito para su día a día. Hacer las compras, ir a la lavandería, citas con el médico, trabajo, guardería, todas las necesidades que se están deteniendo bruscamente.
Excepto que no es así como funciona. La vida y nuestras responsabilidades no terminan porque las necesitemos. Los niños todavía necesitan ser alimentados y las facturas aún deben pagarse.
Aún tienes que llegar a tiempo al trabajo.
Y esta verdad pesó mucho sobre los conductores de autobuses en huelga. “Nos rompe el corazón saber que hay tanta gente que depende del transporte público, pero ahora mismo debemos sacar a los conductores y a sus familias primero”, compartió Greg Landers.
Cuando comenzó la huelga en julio, había esperanzas de que no duraría más de una semana y de que Transdev aceptaría los términos del sindicato. Sin embargo, la huelga duró más de un mes.
Según el sitio web de la unión Teamsters, “Esta es la tercera vez que Transdev provoca una huelga de Teamsters en California en menos de tres meses”. Esto hace considerar las condiciones laborales a las que esta empresa somete a sus empleados.
Un mediador federal vino a Visalia y se reunió con el sindicato y Transdev el jueves Agosto 17.
Y de repente, la ciudad de Visalia y Transdev publicaron que se había llegado a un acuerdo el día 18 y que el servicio comenzaría nuevamente el día 19.
El Sr. Landers confirmó que “El mediador federal logró que TransDev aceptara más días de enfermedad y algunos cambios de idioma que beneficiarán a los empleados, fue suficiente para que los miembros ratificaran el contrato”.
La huelga terminó después de 42 días.
