(Nota del editor: Esta nota fue publicada originalmente por Ethnic Media Services)
Los trabajadores domésticos en los Estados Unidos están mal pagados y explotados y en gran medida, están exentos de la protección de la legislación laboral, afirmó Ai-Jen Poo, Presidenta de la Alianza Nacional de Trabajadores Domésticos.
La conocida activista por los derechos laborales encabeza actualmente una campaña para aprobar la Declaración Nacional de Derechos de los Trabajadores Domésticos (NDWA, por sus siglas en inglés). El proyecto de ley fue presentado en la Cámara de Representantes por la diputada demócrata Pramila Jayapal (D-Washington State) y en el Senado por la senadora Kirsten Gillibrand (D-Nueva York) y Ben Lujan, (D-Nuevo México).
En abril, la NDWA—en colaboración con la coalición Care Can’t Wait (el cuidado no puede esperar)—obtuvo una importante victoria: el Presidente Joe Biden promulgó 50 órdenes ejecutivas dirigidas a mejorar la atención y la protección de los trabajadores domésticos. Abril ha sido designado Mes del Reconocimiento de los Trabajadores Domésticos.
“En todo Estados Unidos, los trabajadores domésticos nos asisten en la crianza de nuestros hijos, ayudan a los adultos mayores en la transición para envejecer con dignidad y apoyan a las personas con discapacidad, dando tranquilidad a las familias y haciendo posible que millones de estadounidenses ganen un sueldo mientras sus seres queridos están a salvo y seguros”, dijo Biden en una declaración anunciando las órdenes ejecutivas. “Estos héroes anónimos fortalecen a nuestras comunidades y forman la columna vertebral de la economía de nuestra nación”.
Sueldos bajos, sin días de ausencia por enfermedad
El presidente señaló que los trabajadores domésticos se encuentran entre los peor pagados dentro de la economía estadounidense, y que a menudo, tienen que hacer malabarismos con varios empleos a la vez que enfrentan el reto de atender a sus propios hogares.
“Los trabajadores domésticos están especialmente sobrecargados”, dijo Poo el 19 de julio, en su intervención en la primera cumbre de la Fundación SCAN “Advancing Health Equity in Aging” (“Promoviendo Acceso Equitativo a Servicios de Salud Para Adultos Mayores”). “Otros países tienen una red de seguridad social. Recurrimos a trabajadores domésticos para que cuiden de nuestras familias, pero están descaradamente mal pagados, no tienen el beneficio de ausencia por enfermedad y a veces no tienen días libres”, dijo.
“Hemos trabajado para que el cuidado de niños y ancianos sea un trabajo bien remunerado, con beneficio de ausencia por enfermedad y tiempo de descanso remunerado. Los avances han sido lentos y graduales”, dijo Poo.
Carta de derechos de los trabajadores domésticos
Poo ha trabajado en temas de derechos laborales desde 1996, y en 2014 recibió una beca MacArthur, también conocida como “Genius Grant” (“Beca Para Genios”).
La NDWA se creó en 2007. Logró su primera victoria tres años después, cuando el estado de Nueva York aprobó la primera Carta de Derechos del Trabajador Doméstico del país.
La nueva ley proporciona amplias prestaciones laborales a los trabajadores domésticos, incluido el pago de horas extras, vacaciones pagadas, ausencia por enfermedad y cobertura de seguro médico. La legislación se revisó en 2021 para añadir protecciones adicionales, incluidas disposiciones para los trabajadores indocumentados, que a menudo se enfrentan al robo de salarios por parte de sus empleadores. En Nueva York, los trabajadores domésticos se definen como niñeras a tiempo completo, au pairs, amas de llaves y cuidadores de adultos mayores.
El valor de los relatos
Poo habló sobre el valor de escuchar relatos directamente a las personas que queremos servir. “Cuando nos propusimos reescribir la legislación laboral en Nueva York, nos dimos cuenta de que teníamos que preguntar a los trabajadores domésticos qué es lo que necesitaban realmente”.
La NDWA organizó una conferencia y se puso en contacto con posibles asistentes en iglesias, parques y otros lugares. “Escuchamos a cada uno de ellos durante horas”, dijo, señalando que “había intérpretes en siete idiomas”.
“Escuchar a la gente nos ayudó en mucho a ganar. Hay que comprometerse con la gente cuyos intereses están de por medio”.
Poo compartió su credo: “Escuchar para aprender, no para confirmar”.
Legislación estatal
Diez estados han aprobado ya leyes para proteger a los trabajadores domésticos. California aprobó en 2013 la ley AB 241, que garantiza, en parte, el pago de las horas extras a los trabajadores domésticos a razón de una vez y media su salario habitual por cualquier hora trabajada que supere las nueve horas diarias o las 45 horas semanales.
Connecticut, Hawai, Illinois, Massachusetts, Nevada, Nuevo México, Oregón y Virginia también tienen alguna versión de la Ley de Derechos de los Trabajadores Domésticos. Y tres ciudades también han aprobado leyes similares: Filadelfia, Chicago y Seattle. La ley de Filadelfia se considera la más estricta del país, ya que exige un contrato por escrito con una descripción de las tareas, junto con descansos y pausas para comer, así como tiempo libre remunerado.
Atención a las personas con discapacidad
Los intentos para establecer una legislación de este tipo han sido rechazados por organizaciones de apoyo a las personas con “capacidades diferentes”. “Aumentar el salario mínimo de los asistentes personales sin aumentar los recursos de Medicaid significa que muchas personas perderían el acceso a sus cuidadores. La gente no podía pagar el costo del cuidado”, explicó Poo. Insistió en la necesidad de ampliar los recursos financieros para la comunidad de personas con discapacidad.
“Tantas opciones falsas nos atrapan”, dijo Poo. “Tenemos que encontrar la verdad emocional”.
“Nuestro mayor reto es hacer que la gente comprenda que el cambio es posible”, afirmó. “No puedo creer lo lejos que hemos llegado”.